Descripción
Conoce las frutas de Aragón
La andadura de este dulce comienza dos milenios atrás, en la Iberia Romana. La localidad de Augusta Bilbilis (Calatayud), destacaba por la calidad de la fruta cultivada en sus tierras y por su método de conservación, tras macerarla y cocerla en una especie de sirope.
Durante siglos se conservó la costumbre culinaria autóctona de confitar la fruta. Llegados al siglo XX, un pastelero genial tuvo la ocurrencia de bañar en chocolate la fruta confitada, ya de por sí magnífica. Fue tal el éxito del dulce, las frutas de Aragón pasaron a considerarse un producto típico de repostería regional y, con buen criterio, se ha protegido y reglamentado su elaboración para preservarlo de imitaciones.
¿Cómo se elaboran las frutas de Aragón?
La fruta fresca se selecciona y se parte en porciones de un tamaño determinado. Acto seguido, se cuece en almíbar. El azúcar es un conservante natural y preserva el buen estado de la fruta. La humedad, responsable de que los alimentos se echen a perder, y el agua de la fruta es sustituida por el almíbar azucarado, lo que garantiza la durabilidad de la fruta.
Otra opción consiste en incorporar diferentes licores al líquido de maceración, por lo que las posibilidades de combinar los sabores de frutas y licores enriquecen la gama disponible.
Tras la cocción, se baña la fruta confitada en chocolate con un contenido de cacao del 34 %. El chocolate se adhiere de forma uniforme al sirope, y ya sólo queda envolver la fruta en su famoso celofán brillante. La presentación puede consistir en una bolsa o en una no menos conocida cesta de madera. El regalo más característico de Aragón, es el más rico.
También tenemos frutas de Aragón sin azúcar.
Valoraciones
No hay valoraciones aún.